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sábado, 28 de junio de 2014

SUEÑO 28 DE JUNIO

Miré hacia el cielo, la luna era enorme, parecía que se acercaba hacia nosotros pero, en realidad, permanecía quieta, colgada ahí, para que pudiéramos contemplar su belleza.




Bajé la mirada y, de repente, gritos escalofriantes me hicieron dar un bote.


Miré a mi alrededor y todos observaban el cielo. Seguí sus miradas y entonces lo vi, la luna se hacía pedazos con explosiones de fuego que se la tragaban. Miles de trozos de roca se separaban dejándonos a todos mudos por el terror.

Contemplamos sin apenas respirar como la luna desaparecía del firmamento.

Lo primero que pensé “es nuestro fin”. Mareas desequilibradas que pueden hacer que el mar nos trague en horribles lengüetazos de sus olas.
Miles de trozos de roca que se precipitarían hacia nosotros, enormes piedras que nuestra atmósfera no podría parar.
No dispongo de un conocimiento científico suficiente para poder confirmar que mis pensamientos eran reales.
Pero si tengo un instinto humano, una intuición la cual me hacía estar segura de nuestra pronta desaparición.

Me di cuenta de que lloraba, a mi alrededor reinaba el silencio, las personas y sus caras de miedo, pánico, terror, incertidumbre hacia un futuro incierto.


De pronto, movidos por una fuerza desconocida, comenzamos a correr para llegar a nuestras casas…






Ante este sueño he investigado un poco y parece que he basado mi desvariación nocturna en cosas que había leído e imaginado por sentido común.

Aquí dejo parte de un post en el que explica los tres principales desastres si la luna desapareciera.


1) Si desapareciera la luna el efecto más inmediato sería la desaparición de las mareas. En las mareas de la Tierra influyen el Sol y la Luna, pero la fuerza dominante es de la Luna. Si desapareciese la Luna, las mareas serían solo un oleaje suave. La desaparición de las mareas tendría un importante efecto perjudicial en los ecosistemas costeros. Los manglares, por ejemplo, dependen de los movimientos regulares de la marea para recibir nutrientes y cosas similares. Cambiarían también las pautas de las corrientes oceánicas, lo que provocaría un importante cambio climático.

2) Al no haber Luna desaparecería su atracción sobre la Tierra, con lo que se desequilibraría la órbita de la Tierra. Esto haría que la Tierra se desviase de su órbita actual en una dirección que dependería de su posición y la de la Luna en ese momento. El resultado probable sería una órbita más elíptica y mayores diferencias de temperatura y gigantescos cambios climáticos que harían nuestro planeta inhabitable. En estos momentos el eje de la nave Tierra señala directamente hacia arriba y así cada uno de los puntos del globo reciben una cantidad constante de calor a lo largo del año, pero si se tambalease la Tierra podría ocurrir que su eje se pusiese paralelo al plano de la eclíptica, entonces los terrícolas se pasarían seis meses del año sudando bajo el ardor interminable del Sol, para después dar la vuelta y tiritar durante los seis meses siguientes, ocultos en la frígida superficie del lado oscuro de la Tierra.

3) Sin Luna, desaparecería una importante fuente de luz durante la noche. Esto afectaría a la conducta de todos los animales nocturnos y a la sincronización del comportamiento asociado con el período lunar. A los búhos les resultaría más difícil cazar y a los insectos encontrar pareja, porque levantan el vuelo hacia la Luna.

En definitiva que si unos alienígenas se llevasen de pronto la Luna nos moriríamos.



Gracias a: http://economy.blogs.ie.edu/archives/2007/06/que_le_pasaria.php   

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